QUINTA VICTORIA CONSECUTIVA DE RÉCORD
La quinta victoria consecutiva conseguida por el Unión Financiera Baloncesto Oviedo en Lleida supuso el récord de victorias consecutivas conseguidas por los carbayones en la LEB Oro.
El estreno de Carles Marco en el club ovetense no puede ser más satisfactoria. A la primera derrota conseguida por el Unión Financiera Baloncesto Oviedo en la primera jornada en Huesca (con una canasta en el último segundo), 77-75, siguió el primer triunfo de la temporada en Pumarín ante CB Prat Joventut (79-69). En el
tercer partido de la temporada, los ovetenses sufrieron un duro golpe en la pista riojana del Cocinas.com (92-64) lo que hizo reforzar un equipo que se sintió muy dolido con la mala imagen dada.
Desde entonces, el Unión Financiera Baloncesto Oviedo no ha hecho más que ganar. Y lo más importante de todo ello es que dos de las cinco victorias consecutivas han llegado de encuentros a domicilio. Las dos primeras llegaron en Pumarín contra Ourense y Cáceres Patrimonio de la Humanidad (76-68 y 82-78 respectivamente). La tercera llegó en un campo complicado del que actualmente es el segundo en la clasificación, FC Barcelona Lassa (73-90), donde los ovetenses realizaron un partido casi perfecto que trabajaron a la perfección desde la defensa. La cuarta alegría volvió en el partido intersemanal en Pumarín donde consiguieron imponerse a Planasa Navarra en un partido cómodo 72-63
que dominaron de principio a fin. Y la última, la más sufrida, la quinta victoria consecutiva, llegó en el campo de Actel Força Lleida donde ganaron por solo dos puntos (72-74).
Para buscar cuatro victorias consecutivas del Unión Financiera Baloncesto Oviedo tenemos que remontarnos al primer año de los carbayones en la LEB Oro. Esa temporada de ensueño donde se llegó hasta las semifinales del playoff por el ascenso. Fueron en las jornadas 11, 12, 13 y 14 cuando se ganaron cuatro partidos seguidos: contra Ourense en Pumarín (78-77), en Huesca (66-71), contra Logroño en casa con el famoso alley-hoop de Juan García (76-75) y en casa también contra Lugo (80-66). Fue en Melilla donde se cortó nuestra buena racha.
De nuevo, volvemos a soñar con una temporada que se presenta ilusionante para todos los amantes del OCB. Este sábado tendremos un durísimo rival en Pumarín, Quesos Cerrato Palencia. Pero con nuestro público y la magia de nuestro Pumarín, soñaremos con la victoria hasta el pitido final.


