Un paso sólido en la preparación del Alimerka OCB
El Alimerka OCB ha vencido por 87-94 a Palencia Baloncesto a domicilio en el tercer partido de pretemporada de esta 24/25. Y lo ha hecho como el sábado pasado en casa de Grupo Alega Cantabria: con un juego alegre y vistoso y con excepcional acierto en el lanzamiento de tres puntos.
Hasta un 67% se han ido los de Javi Rodríguez con un Joaquín Valinotti sobresaliente. 21 puntos, 4/5 en tiros de tres, 7/8 en libres y 4 asistencias para un 27 de valoración que ha amasado el de Las Rosas llevando al equipo sobre sus hombros cuando el partido estaba en el alero.
Porque la presentación del OCB ha sido la misma que hace cuatro días en Torrelavega. Si aquello era un partido oficial entreverado de pretemporada lo de hoy era pretemporada con sabor a saber qué es el OCB. Y el equipo no engaña cuando arranca cortando línea de pase, corriendo, metiendo ritmo y colocando un 8-15 para tiempo muerto de Palencia en una de las canchas más difíciles y un equipo de hechuras ACB.
Así, en el primer cuarto anotaban casi todos. Mikel parando un contraataque, Devin sacando la mano a pasear, Hugo cortando línea de fondo… Una tarjeta de presentación que debe servir de poso, de cimiento para construir, no un techo como la pretemporada aquella de hace tan solo doce meses. En estas, un 21-26 en la que tan solo Krutwig sostenía a Palencia por dentro.
Por dentro. Ahí vino el quebradero de cabeza de los visitantes durante buen tramo de partido. Cediendo rebotes defensivos y concediendo a un físico Palencia segundas opciones que los de Guil no desperdiciaban. Sobre todo en un segundo cuarto en el que el local se manejó mejor a ritmos lentos y que con un parcial 9-0 lograba establecer ventaja. Aparecieron, no obstante, Hutchinson, Amarante y West desde más allá del arco para establecer la igualada en el camino a vestuarios (47-47).
En la reanudación, probaturas, quintetos con Martí -que volvió a sus fueros tras el partido de Cantabria- y López para tratar de igualar el músculo en la pintura. Menos alegría pero la misma idea de no negociar nada atrás y tratar de castigar en el momento oportuno. Fue el momento de Duscak que con seis puntos amén de un triple de West que mandó el cuarto a dormir con un exigua ventaja (64-69).
Y ya en el último, con otro ritmo, piernas pesadas y toda la carga de pretemporada, el OCB tuvo más puntería frente a un Wintering que amasó un parcial de 6-2 de salida. El base palentino, castigado por las faltas, se echó el equipo a la espalda hasta que el acierto visitante decantó el partido. Dos triples seguidos de Mikel Sanz y otros dos, también de una tacada de Valinotti pasaron del 76-75 al 80-87 a falta de 3’30 para el final.
El OCB remataba una faena de construcción con la solidez de una presa de pantano. Los cimientos están puestos, las ideas claras y sólo quedan 17 días para que arranque la competición de verdad. Antes, este próximo sábado oportunidad de ver al equipo en Pumarín y seguir trabajando en conceptos y afinando la pretemporada.
Parciales: 21-26, 26-21, 17-22, 23-25.