Primera derrota del curso para el Alimerka OCB

El Alimerka OCB no pudo con Guuk Gipuzkoa. Un mal inicio de último cuarto para el local, que encajó un 0-10 de parcial cuando se había ido seis arriba en el tercero, lastró el esfuerzo de todo el encuentro ante un sólido conjunto visitante, mejor en la pintura y más certero cuando había que serlo. Un revés que no emborrona el arranque de liga pero que hace recalcular a los estándares de la liga lo que es el OCB y a lo que aspira. Al final, 81-86.

Porque Gipuzkoa con un Aurrecoechea estelar en el poste bajo marcó la pauta de la intensidad durante el partido y el OCB no se encontró. Ni Hall, ni Stuckman, ni Rozitis, ni Cosialls, apenas un Marc Martí multiplicándose pudieron frenar la principal vía de anotación rival. Por fuera sí, por fuera Barcello solo se encontró en el tramo final y cuando ya era tarde para un OCB que sobrevivió a base de triplazos. Ora Horton en la primera parte, ora Lobaco, Sanz y Pérez en la segunda para llevar al OCB a disputar un partido de una exigencia extrema.

Esto es la LEB Oro, vaya. Porque sin jugar un gran baloncesto como en los dos primeros partidos, los de Javi Rodríguez se aferraron a él en un Pumarín entregado. Gipuzkoa pegaba el primer arreón y respondía con Horton inspiradísimo. 20-18 al acabar el primer envite. Misma igualdad en el segundo, también a arreones, también perdiendo la batalla del rebote, una de las principales fortalezas del equipo hoy disminuida. 38-37 al descanso.

El tercero fue el mejor cuarto local. Un cambio a zona propició que los de Rodríguez se escaparan en el marcador con un Mikel Sanz multiplicándose: dos triples y acabando contraataques. Más seis en un pispás: 62-56.

Y de lo que parecía otra más a la buchaca, la derrota. «Nos han ganado, no lo hemos perdido», ha explicado Rodríguez en la conferencia de prensa. Y tanto. Porque con un parcial de salida devastador, el OCB se ha rehecho para llegar a intentar a ponerse por delante. Dos triples de Josep, dos de Lobaco y 74-73, otra vez sólido atrás y adelante el aragonés una jornada más. Pero no. A tres minutos del final y con un Guuk Gipuzkoa enchufadísimo, los de Mikel Odriozola han sabido llevarse el partido para Donosti.

La primera derrota en 11 partidos contando toda la pretemporada llega en la tercera jornada de una liga igualadísima. Nadie dijo que iba a ser fácil. El viernes visita a Ureta Tizona en Burgos. Otra dura piedra de toque.